Con la gran transformación digital que protagoniza casi cualquier sector de la actualidad, los consumidores finales y sus preferencias de compra se han visto transformados por completo a una nueva realidad. Con unas tendencias mucho más digitales, los hábitos de consumo de la sociedad actual cada vez están más enfocados a canales online que les proporcionen comodidad, rapidez e inmediatez.
Lo que en un principio era una opción arriesgada para unos pocos, hoy en día la compra online es una tendencia creciente del momento, un hábito de consumo que ha llegado para quedarse de manera permanente. Por supuesto, esto ha provocado que las demandas y prioridades de los clientes también hayan evolucionado, modificando su perfil como consumidor. Empujados a ser más digitales, los consumidores buscan a través de internet diferentes elementos, artículos o servicios que necesitan en vez de ir a establecimientos comerciales donde pueden o no encontrar dicho producto. La compra online, con la seguridad que hoy en día proporciona, les ofrece mayor comodidad y rapidez.
Esto hace que de manera paralela a esta nueva realidad comercial, aparezcan nuevos perfiles de clientes digitales. De hecho, desde la consultoría internacional g reafirman la teoría de que “la digitalización ha evolucionado al mismo tiempo que lo han hecho las personas con respecto a sus preferencias de consumo”, y añaden que “hoy en día el público jóven se muestra mucho más concienciado con la sostenibilidad y el desperdicio 0 de lo que estaba años atrás. Por otra parte, el consumidor más senior se sumerge cada vez más en todas las nuevas plataformas digitales que no son nativas para ellos”.
Por lo general, el cliente selecciona aquel producto o servicio que le provoque sensaciones o emociones. En un amplio espectro con infinidad de productos similares, es necesario destacar por encima de la competencia para conseguir ser la marca elegida en la gigantesca oferta de Internet. A pesar de que la compra online es mucho más sencilla y podría ser más impulsiva, el cliente actual tiende a ser mucho más consciente y sostenible. “Al igual que sucede con la protección del medioambiente, el consumo consciente y enfocado a la salud es cada vez mayor. Por ello, no es de extrañar que las preferencias de compra de productos ECO y BIO son cada vez mayores, al igual que sucede con los artesanales o los bajos en azúcares”, comenta Axis Corporate.
Sin embargo, es cierto que los hábitos de consumo actuales son cada vez más digitales y tecnológicos, buscando en ello una inmediatez de compra y una mayor comodidad. Desde Axis Corporate apuntan que “el uso de canales online para compras de gran consumo ha aumentado considerablemente en los últimos años. Sin embargo, debido a que suelen ser productos que el consumidor quiere en ese preciso momento, los canales online no han conseguido desbancar a las tiendas físicas. De hecho, ambos formatos de venta continúan en una sana convivencia destinada a perdurar, haciendo que el consumidor necesite del perfecto funcionamiento de ambos modelos de venta”.Queda claro que el presente y el futuro del gran consumo necesita de la implementación de diferentes tecnologías y procesos online con los que hacer evolucionar, adaptarse e impulsar nuevos hábitos de consumo.
