Este año está siendo uno de los más decisivos en materia de contratación de derechos de emisión de fútbol. La competición tanto a nivel internacional como nacional, se ha vuelto excesivamente cara en consonancia con lo que está sucediendo en el entorno europeo.
La operadora Vodafone ha sido la última en plantarse. Ante la subasta de derechos de emisión de partidos internacionales (concretamente los relativos a la Copa de Europa y a la Champions League), la compañía argumenta una imposibilidad de rentabilización del servicio.
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Vodafone renuncia a la Champions
Vodafone lleva todo el año quejándose de las ligas internacionales y del coste que supone la emisión de partidos. Al final ha hecho honor a su palabra y ha anunciado que no va a emitir partidos de la Champions ni de las competiciones europeas, al menos hasta el año 2021.
En su lugar apostará por ofertas de servicio que tengan al cine y a las series de televisión como prioridad, es decir, entretenimiento audiovisual alejado del deporte.
¿Se puede pagar 50 euros al mes por fútbol?
Según Vodafone, el problema con los derechos de la emisión de fútbol es el coste versus la rentabilidad. Según informa la compañía, haría falta cobrar a los usuarios hasta 50 euros al mes para conseguir algo de rentabilidad.
Esta cifra dista mucho de la realidad. Los servicios de televisión de pago exigen un coste mucho menor a este importe si se desea ser competitivo. ¿Cómo lo hace el resto de empresas? Obviamente se basa en la combinación de tipologías de entretenimiento como cine y series, entre otros.
Apuesta por cine y series
Vodafone, sin embargo, argumenta que solo con las series y las películas puede conseguir suficiente rentabilidad. No obstante, pese a lo sincero de su propuesta, lo cierto es que la operadora tiene el potencial de 400.000 abonados que podría perder.
Son precisamente los que están abonados a su paquete de fútbol, al menos al que tenían hasta el momento. Sin este paquete, al menos en teoría la operadora tiene el riesgo de que otras empresas, con Orange y Movistar como principales peligros, el posible destino de estos usuarios en 2018.
