El conflicto de Cataluña ha llegado a las empresas con la representación del Banco Sabadell y La Caixa como ejemplos más notorios. Uno de los casos más importantes a nivel empresarial y su regulación estatal está relacionado con La Caixa, debido a su interés de salir hacia otras provincias en cuanto a la ubicación y registro de su sede.
Hasta hoy La Caixa no podía realizar esta acción sin tener que reunir una junta de accionistas. Como ella, todas las empresas de una constitución similar veían que cualquier cambio de sede podía alargarse en el tiempo, lo que impide que en momentos de urgencia pueda actuarse con mayor rapidez.
Nuevo real decreto ley para cambiar de sede
Ante esta situación, el 6 de octubre el Consejo de Ministros aprobó un real decreto que ha sido publicado al día siguiente en el Boletín Oficial del Estado (BOE) por el que se permite a las empresas cambiar de sede sin tener que consultar a la junta de accionistas.
El nuevo decreto ley se aplica de forma inmediata por lo que desde ya mismo las empresas pueden aprovecharlo para cambiar la ubicación de su sede. La única excepción es aquella situación en la que la empresa haya una mención expresa en los estatutos que indique la imposibilidad de tomar esa decisión sin la junta.
Se trata del cambio más importante respecto a la toma de decisiones empresariales que se ha aprobadoi legalmente en los últimos años. Hay que remontarse hasta 2015 para ver una normativa similar, cuando se trasladó la decisión de cambio de ubicación de las empresas a los órganos administrativos.
La Caixa podrá salir de Cataluña de forma inmediata y ya ha anunciado su intención de hacer el cambio social de sede a Valencia (Comunidad Valenciana). Se une así a Banco Sabadell en cuanto a ubicación. La entidad financiera ya anunció previamente que decidía trasladar su sede oficial a Alicante.
Junto a ellas, otras empresas han anunciado su intención de salir de Cataluña como Gas Natural Fenosa, que en su caso ha decidido optar por Madrid para su nueva ubicación.